Los Zorros Dorados XL tuvieron distracciones a la hora cero y cayeron por segunda jornada consecutiva en la Conferencia Cuatro de la categoría Juvenil de Primavera de la Organización Nacional Estudiantil de Futbol Americano (ONEFA).
Un 12-14 doloroso para la escuadra xalapeña, debido a que tuvieron el partido en sus manos y los errores le dieron la victoria a los Linces de la Universidad del Valle de México, que habían sido bien contenidos por la defensiva en la mayoría de las ocasiones.
La visita se fue adelante en el marcador en el primer cuarto, gracias a una buena ejecución bien concluida por Bernardo Ballesteros.
A partir de ahí, la escuadra albina cambió de cara, se volvió más agresiva e hizo pesar el Campo “Quirasco”; sin embargo, a la hora de tener la sangre fría vinieron los descuidos; por ejemplo, una bola suelta en la zona roja en el segundo periodo, cuando Zorros Dorados tenía todo para igualar el score.
De hecho, con ese regalo Linces estuvo cerca de ampliar su ventaja, pero la defensiva veracruzana controló el momento, a pesar de una decisión arbitral polémica que le dio una oportunidad extra a los felinos y que no aprovecharon.
El medio tiempo sirvió para recargar bríos. Los jugadores hablaron. Los coaches motivaron. Y así se sintió en el campo.
Los xalapeños prácticamente fueron dueños de todo el tercer cuarto, ocupando la mayor parte para cruzar todo el terreno de juego y por fin conseguir un touchdown, luego de cinco periodos de ayudo seguidos, contando el partido anterior.
Pero el pateador falló el punto extra.
La defensiva volvió a aguantar, para darle la oportunidad a Sebastián Velasco de conducir a su ofensiva hacia algo grande. Justamente fue el mariscal de campo el que le dio la ventaja a los de casa, con una corrida rompiendo a la defensa oponente y la concentración necesaria para seguir la línea lateral sin salir del campo.
Sin embargo, la conversión por los dos puntos no se consiguió por milímetros.
La mesa estaba servida para que los albinos se reencontraran con el triunfo.
Linces salió en busca de la hazaña con cuatro minutos en el reloj y estuvieron contra las cuerdas, en jaque, incluso la defensa de Xalapa estuvo a punto de detener el ataque rojinegro en par de ocasiones, pero el ímpetu les ganó abriendo el camino al visitante.
Entonces vino una gran jugada del mariscal mexiquense, Samuel Amaya, encontrando a Axel Amaya con un largo pase, superando la marcación del esquinero Juan Fernando Ramírez para que cayera un balde de agua helada en el ánimo de la afición de casa, que registró una buena entrada en el “Quirasco”.
Con foja de dos ganados y mismo número de perdidos, Zorros Dorados tratará de redimir el camino el próximo 14 de mayo, cuando reciban a los Aztecas de Ojo de Agua.