Belén Godos ve al deporte como un estilo de vida

Por alcalordeportivo
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Escrito el:: 12 enero, 2022

Atletismo, marcha y también practicó la lucha donde representó a Veracruz

Por Julián Rodríguez

Cuando era niña Belén Godos Moctezuma se subía a una silla y fingía que daba clases de educación física, sin saber que un día esos sueños se volverían realidad.

“Mi mamá me cuenta que desde chica quise ser maestra de educación física, tal vez no fui muy inteligente, pero casi siempre estuve en las escoltas de mis escuelas”, dijo la ahora licenciada en Educación Deportiva con maestría en Educación y Ciencias del Entrenamiento Deportivo.

Para ella el deporte siempre ha sido su pasión, por lo que daba de un salto a otro en cualquier disciplina, ya que se inició en el atletismo con la cubana Miguelina Cobián y más tarde decidió introducirse a la marcha, con Francisco Guevara, sin embargo, terminó su recorrido en luchas asociadas.

“Yo he sido una persona que viene de una familia humilde, pero que desde pequeña le ha gustado el deporte y que gracias a él conocí a mucha gente y muchas ciudades”, dijo en entrevista en la que ha sido su casa durante un par de años, el gimnasio de luchas asociadas de la Colonia Revolución.

Recuerda que su padre el maratonista José Godos Hernández, fue el ejemplo claro y palpable para meterse de lleno a la actividad deportiva. “Mi padre siempre me inculcó el deporte y siempre lo iba a ver a sus competencias y me dio por correr, por lo que mi primera experiencia fue con la cubana Miguelina Cobián, aunque no se me dieron las pruebas de velocidad por mi complexión física, por lo que decidí probar en marcha con el profesor Francisco Guevara”, precisó.

Sentada en las gradas del coloso luchístico, Belén Godos suspiró y dijo que esa disciplina la llevó a representar a Veracruz y en uno de sus viajes el destino la estaba esperando. “Empecé a viajar y en un evento de Olimpiada Nacional conocí al que ahora es mi esposo, y aunque pasó el tiempo y nos dejamos de ver, nuevamente nos encontramos y decidimos unir nuestras vidas”, señaló.

Precisamente fue Óscar Aguilar Hernández quien influyó para que se dedicara de lleno a luchas asociadas, disciplina que le ha dado las mayores satisfacciones, pues obtuvo algunas medallas en la categoría mayor. “La lucha me gustó, pero empecé a entrenar ya grande, cuando mi hijo ya tenía seis meses y aunque no fui buena le di a Veracruz algunas medallas en la categoría Primera Fuerza”, expuso.

Godos Moctezuma es de esas mujeres que no le gusta quedarse con lo que tiene y decidió regalar sus experiencias a los niños y jóvenes, por lo que buscó la fórmula para estudiar y enriquecer sus conocimientos. “Empecé como asistente de mi esposo y aproveché que hubo un curso internacional para entrenadores y la Federación escogió a 10 y tuve la oportunidad de asistir”.

Mujer de ideas y sueños decidió ser independiente y no vivir a la sombra de nadie. “Siempre quise ser yo, antes era la esposa de Óscar, pero no quería vivir bajo su sombra, sino que quise destacar por mis méritos y me llegó la oportunidad de ocupar este espacio, por lo que desde hace cuatro años aquí seguimos enseñando a los niños y regalándoles nuestras experiencias”, señaló.

Asimismo, el municipio xalapeño implementó el programa “Semilleros Deportivos” y desde 2018 fue colaboradora, pero teme que tras culminar la administración municipal los chicos queden en el aire. “Yo los sigo entrenando como antes, pues al final de cuentas ellos no tienen la culpa si hay o no contrato, hay que seguir trabajando con ellos”, agregó.

Es de las formadoras que les gusta reconocer el esfuerzo de sus alumnos. “Si, porque antes que nada soy humanista, pues tengo la amarga experiencia que algunos entrenadores jamás reconocieron mi labor, nunca nadie me dio una palmadita en la espalda y me sentía mal porque no me dieron el interés, por lo que yo trato de no hacer lo mismo con mis niños a quienes yo siempre llamo mis campeones”.

Belén Godos no pone en práctica males añejos que han deteriorado la esencia de su deporte. “Como vengo de abajo trato que todos seamos iguales. Aquí nadie es más que alguien, pero tampoco me gustan las injusticias, los amiguismos o los compadrazgos, tal vez por eso no he tenido cabida en algunos lugares, tal vez por eso no estoy en una mejor posición económica porque siempre he criticado eso, por eso no tengo lujos y hasta mis amigos entrenadores me dicen que soy muy tonta porque regalo mi trabajo, pero no pido nada si así soy feliz”.

Belén Godos Moctezuma, madre, hija, esposa y entrenadora, disciplinada, leal y honesta, son las virtudes que posee y que la empoderan en un mundo donde el hombre va perdiendo terreno y la igualdad de géneros, como debe, se hace cada día más presente.