Cuando asumió la dirección técnica de los Xolos, Pablo Guede tenía muchos motivos para ilusionarse. El estratega argentino contaba con un mejor plantel que el del Morelia, al que llevó hasta las semifinales, pero todo le ha resultado mal en las primeras jornadas.
Aunado a su pobre cosecha de puntos (cuatro), Guede sufre por un problema mucho más severo: la indisciplina de algunos jugadores. Resulta que, pese a las restricciones por la pandemia, los atacantes Miler Bolaños y Ariel Nahuelpán se fueron de fiesta, por lo que éste ya fue dado de baja oficialmente. El otro, sigue en vilo. Ni hablar.