Le faltó experiencia al técnico de la Selección Sub-23 Jaime Lozano, para detener el partido que jugó su equipo ante Cruz Azul el pasado domingo y poner calma, con lo cual se haya evitado la lesión de Alexis Vega, porque el técnico de Chivas Víctor Manuel Vucetich tiene información que el elemento celeste Ignacio Rivero andaba caliente, quería guerra no solamente con Vega, también con otros jugadores del combinado azteca.
“Investigamos la situación, si hubiera sido una simple jugada no pasa nada y hubo manifestaciones porque el jugador estaba molesto, le quería pegar a varios, dar patadas y cuando le pega, pues es una barrida por detrás porque le cae con las pompis en el tobillo. Así hemos visto muchas lesiones y era un amistoso, no tenía ningún sentido barrerse porque puedes lastimar a un compañero y es ahí donde es la molestia”.
Esa es la primera falla, que no se haya detenido el partido para calmar los ánimos al ver que este jugador de Cruz Azul, se olvidó que era de preparación y se viene el segundo error, grave también porque a Vega una lesionado, no le hicieron prueba médica.
A Vega debieron mandarlo a que se realizara una resonancia magnética, para regresarlo al club con el estudio y un informe detallado de lo que sucedió, para que el cuerpo médico de Chivas tuviera antecedentes de cómo recibían al jugador.
Muy mal Selección, porque lo regresaron sin resonancia, sin informe y la dirigencia tapatía tuvo que hacer todo desde cero, horas después de la lesión, un error que reclama Chivas a Selecciones porque se pone en riesgo la salud de la persona.
“Si le sumamos a esto que no hubo un reporte médico, que no hubo una atención para la directiva con Ricardo Peláez, quien tuvo que llamar a Europa, donde estaba la gente que en un momento dado podía dar el seguimiento a todo esto.
Eso es lo que molesta, Jaime Lozano podría decir bien los acontecimientos que se presentaron porque él estaba ahí, él pudo tomar decisiones al igual que los técnicos en ese momento para evitar que pasara una situación más grave”.
Vucetich también dijo en Frecuencia Deportiva, que este tipo de concentraciones no tienen razón de ser, mucho menos cuando competencia oficial en puerta en la Liga y la Selección, no tendrá actividad oficial en por lo menos cuatro meses.
“Anteriormente le habíamos solicitado, le habíamos dicho que no tenía caso que llamaran a los jugadores.
Se lo dijimos a Gerardo Torrado, a la gente de Selecciones, porque estamos en plena competencia y en Liguilla, qué caso tiene.
Esto es una programación muy mala de Selección, no tiene sentido, razón, porque llevarlos para hacer un trabajo específico nada más, no tiene caso.
A nosotros nos sirve tenerlos para trabajar el juego, a ellos no porque ni juego tienen y aunado a eso, meten a un equipo que está en competencia, con los riesgos que existen y aunque le puede pasar a cualquiera”.
Destapó el pastor rojblanco, que gracias a una apelación al tiempo de concentración que pretendía Jaime Lozano, se pudo reducir la estadía de sus elementos con la Sub-23.
“Lo hemos manifestado, incluso a la Selección. Gracias a que nosotros apelamos la situación, la concentración se redujo dos días porque ellos estaban buscando terminar el martes.
Nosotros les preguntamos ¿para qué quieren a los jugadores allá, si no tienen competencia? No hay una razón de ser, porque nosotros tenemos competencia real, ellos también deben cuidar la competencia real y tener un sentido de lo que se hace, trabajar en coordinación de equipos y selección”.