LAS VEGAS, Nevada, febrero 9 (EL UNIVERSAL).- El Pancho Villas Army es un grupo de mexicanos avecindados en Los Ángeles, principalmente, que se ha unido para una sola tarea: “Apoyar a la Selección en todos los partidos que juegue en Estados Unidos”.
No quieren hacer política, aunque la política ya llegó a ellos.
Se sitúan en la cabecera norte del estadio. Son cerca de 300. “Compramos todos los asientos por internet”, dice Édgar, quien porta una máscara de Rey Misterio.
Tienen todo preparado para el minuto 4 levantar unas bandas en homenaje a Rafa Márquez, “nuestro mejor capitán”.
Alfonso Martínez es el capitán del Batallón de Phoenix y antes de entrar a temas espinosos aclara: “No estamos aquí tratando de hacer algo político, nos unimos porque así debemos de estar, todos juntos por la unidad del equipo nacional”.
En ese momento aparece Bety, “capitana del Batallón” e interrumpe… “no, sí importa todo lo que sucede en este país en este momento, pero lo principal es apoyar al Tri, antes que nada. Somos la porra nacional. Donde va México, vamos nosotros.
Somos mexicanos, somos estadounidenses, y todo lo que está pasando nos afecta, pero lo primero es apoyar a nuestra Selección, esa es la forma de manifestarnos, lo demás… es para tratar en otro momento”.
Mas no todos piensan así. Afuera, en el estacionamiento, un grupo de connacionales se manifiesta en una nada ortodoxa forma… Han traído una piñata en forma de Donald Trump; primero la cuelgan, después la golpean, la rompen, la queman y la cabeza la patean.
“Ese no me va a correr de mi casa”, gritan sin querer decir más.
El clima se tensa, aunque nada se sale de su cauce natural.