El Universal
Que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en inglés) fallara en favor de los Tigres, dentro de la querella legal que sostienen con Alan Pulido desde hace más de un año, no es el desenlace del culebrón. El club norteño ya alista el contraataque hacia quienes firmaron un vínculo laboral con el chico, sin importar que éste se encontraba ligado a otra institución.
A Alejandro Rodríguez, presidente de los felinos, no le sorprende la resolución. El atacante tamaulipeco posee un acuerdo con el equipo regiomontano hasta junio del próximo año, así es que el Levadiakos de Grecia, con el que jugó durante el primer semestre de 2015, infringió el reglamento.
“Desde el punto de vista contractual, es lo que ya decidió el TAS… Y es inapelable”, recuerda el directivo, entrevistado vía telefónica desde Monterrey, Nuevo León. “Desde el punto de vista deportivo, tienen que preguntarle a Alan [qué va a hacer durante los siguientes días], porque desconozco lo que traiga en la cabeza, y más con la cantidad de asesores, representantes, que trae alrededor.
“Tercero, en la parte económica, obviamente ya podemos proceder a demandar por daños y perjuicios a aquellos clubes que, de forma indebida, brindaron un contrato a Alan, y a él mismo, porque no ha cumplido con el que tiene en Tigres”.
El 3 de julio, el Olympiacos lo presentó oficialmente como su refuerzo para los próximos cuatro años, pero el hombre fuerte de la directiva felina desconoce si el acuerdo ya se signó, por lo que el popular club griego podría no estar en la lista de demandados.
“No sé si firmó un contrato con el Olympiacos. Sé que con el Levadiakos, sí”, aclara. “Esa es la parte económica, pero lo que siempre nos ha interesado es la deportiva.
“Ahora falta la económica, porque también hemos sufrido daños fuertes con todo este proceso que ellos [Pulido y sus abogados] iniciaron y que, gracias a Dios, se dio por terminado”.
Tras integrar al Tricolor en el Mundial Brasil 2014, Alan desconoció la extensión de contrato con los norteños e intentó fichar con algún equipo europeo. Comenzó un proceso legal en el que la Federación Mexicana de Futbol dio la razón al club, por lo que el chico paró durante medio año. Eso sí, de julio a noviembre echó mano del salario que le depositaron los Tigres.
“Definitivamente. Él retiró su sueldo hasta noviembre y luego canceló la cuenta”, relata el presidente felino. “Obviamente, al hacerlo, lo que realizamos fue depositárselo en la Federación Mexicana de Futbol”.
Mientras tanto, recurrió a la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA), que le otorgó un pase provisional en febrero y empezó a jugar en el balompié helénico.
Aventura que, por ahora, terminó. Rodríguez no se anima a pronosticar cuándo reportará Pulido, a quien reitera el deseo de negociar.
“No podemos elucubrar sobre qué van a hacer Alan y sus asesores”, sentencia. “Estamos tranquilos, el tiempo sigue corriendo, también el perjuicio, el daño… Hasta que a alguien se le ocurra venir a sentarse y llegar a algún acuerdo que sea bueno para todos.
“Nada más anoto, porque también nos acusan, o dicen, que le cerramos la puerta. Él declaró que no quería venir a Tigres… Muy bien. Le abrimos la puerta, en el Régimen de Transferencias, con Chivas. Ellos hablaron con él, los escuchó, pero nunca firmó un contrato laboral. El registro se cerró el sábado pasado y con el único que tiene un contrato laboral es con nosotros”.
Así es que deberá ponerse a las órdenes del club.
“Nuestra actitud siempre fue de puertas abiertas, hacer que Alan reflexionara, que no se dejara inducir por gente y cuidara su carrera”, asegura. “Si tenía sueños europeos, la puerta grande para la salida era Tigres”.