Antes de que el Mazatlán FC decidiera otorgarle una nueva oportunidad en la Liga MX, y debido a que ningún club se animaba a contratarlo (ni sus queridas Chivas), Marco Fabián ya tenía listo el botón de pánico para seguir en activo..
Y recibir aproximadamente 10 mil dólares por cada encuentro que jugara.
Resulta que los organizadores de la Copa Mariachi, un torneo entre exfutbolistas que se lleva a cabo en Atlanta, Estados Unidos, entraron en contacto con él para ofrecerle participar. Y él ya había aceptado.