Para Pedro Caixinha, los seguidores del Cruz Azul que se presentaron ayer en las instalaciones de la Noria fueron contratados.
“Esa afición estaba comprada, para eso fue. Aquí [México] con un par de pesos pagan muertes, qué no puede comprar una manta”, dijo el lusitano, después de la victoria de La Máquina 1-0 sobre el América, insuficiente para avanzar a las semifinales (2-3 global).
Por la mañana de ayer, un puñado de fanáticos cementeros colgaron una manta que decía “Ustedes manchan la historia. Jugadores sin huevos«, y encararon a los futbolistas que salieron después del entrenamiento. Julio César Domínguez fue el único jugador que salió para atender las molestias.
Caixinha, decidido que este grupo no representa a la verdadera fanaticada, no reveló quién fue que los mandó
“Si supiera, se los dijera, eso fue lo que me llegó. Pero es raro que haya llegado con cuatro o cinco cámaras, ¿no?. No soy muy inteligente pero soy un poco listo”, remató.
El portugués y todo el plantel salen de vacaciones, al ser eliminados del Clausura 2019, por lo que ya no se preocuparán por otras manifestaciones