Para Sergio Ramos, el despido de Julen Lopetegui como entrenador de España ya quedó atrás y todo el plantel tiene confianza en Fernando Hierro, el nuevo timonel.
Al defensa del Real Madrid le tocó lidiar con el enojo de Luis Rubiales, presidente de la Federación Española, en su primer Mundial como capitán. A pesar de no estar de acuerdo con la decisión del ejecutivo, Ramos tuvo que aceptarla y liderar al grupo de jugadores.
“Cuando eres capitán te toca saber un poco más de la cuenta en situaciones de mayor repercusión”, dijo el zaguero en conferencia de prensa, previo al partido de mañana, frente a Portugal, en Sochi.
“Julen era muy importante. Todos admiramos a [Fernando] Hierro. Le conocemos desde hace mucho tiempo y es el idóneo para este momento. A nivel personal, la salida de Lopetegui fue un momento delicado ”, agregó.
El ex entrenador del combinado ibérico firmó para dirigir al Real Madrid, a tres días del debut mundialista. Rubiales se enteró del contrato por el club blanco y no por el mismo Lopetegui, lo que causó la gran molestia y, posteriormente, el despido.
El defensor subrayó que el equipo español va por encima de cualquier nombre y que está obligado a salir a ganar, sin importar quién esté en el banquillo.
Mientras que Ramos coordinaba la rueda de prensa, calmado y con intención de mandar un mensaje de unión y positivo, el nuevo estratega de La Roja habló poco pero directo.
“Tenemos tres grandes finales, la primera la de mañana. Somos unos privilegiados por estar aquí, vamos a disfrutar”.
Hierro fue capitán de La Roja durante el Mundial de Corea-Japón 2002, donde quedó fuera en cuartos de final en serie de penales, frente a Corea del Sur, tras un polémico arbitraje.
España debuta ante Portugal, campeón de la Eurocopa del 2016, con un Cristiano Ronaldo listo para enfrentar a varios de sus compañeros, específicamente a Sergio Ramos.
“Prefiero tener a Cristiano a favor que en contra. Es un peligro constante, una alarma permanente”, dijo el defensa.
Antes del despido de Lopetegui, los españoles eran los grandes favoritos, pero la situación ha cambiado.