Desde el arranque del partido, Alfredo Talavera y César Arturo Ramos ya cargaban pique, un bagaje de una expulsión del portero por decisión del mismo árbitro.
El veterano guardameta se fue expulsado el lunes de la noche por una falta dentro del área, que le provocó la segunda tarjeta amarilla, ya que había sido amonestado antes por protestarle al silbante.
Hace dos años, en el Apertura 2018, Ramos mandó al vestidor al Tala por constantes señuelos en sus decisiones. Era el partido entre Toluca y Guadalajara, en el estadio Nemesio Diez, con el marcador empatado 2-2.
Gol anulado de las Chivas por fuera de lugar. Talavera tomó rápido el balón y quiso sorprender a los rojiblancos, pero César Arturo no lo dejó y le pidió pausa. Alfredo se quejó. Otra vez, el meta colocó el esférico en el césped para jugar; el nazareno volvió a frenarlo. El arquero perdió la paciencia y le hizo un corte de manga al juez.
Alfredo nunca quitó la sonrisa sarcástica de su cara, le hizo un gesto con su mano izquierda y el ego del silbante no aguantó más: roja directa. La sanción para Talavera fue de dos partidos.
Eso fue el 5 de agosto de 2018. Más de dos años después, el arquero, ahora con los Pumas, le criticó una decisión a Ramos, quien lo amonestó en el comienzo del encuentro en el estadio León, y, antes del descanso, lo expulsó por una falta dentro del área.
El dos veces mundialista ha sido expulsado, con esta última, cuatro veces como profesional… dos de ellas, por César Arturo Ramos.