El juego entre el Atlético de San Luis y el Querétaro se suspendió por una intensa batalla campal entre aficionados, en las gradas del estadio Alfonso Lastras.
Pasados los 84 minutos y con la ventaja de dos goles para los Gallos Blancos, el árbitro Óscar Mejía frenó las acciones al percatarse que la violencia se salió de control en las tribunas.
La zona visitante prácticamente lució como un campo de guerra, cuando las cámartas de televisión captaron a los fanáticos queretanos arrojando piedras a seguidores potosinos. Pese a que la policía hizo acto de presencia, los grupos de animación trataron de invadir otros sectores del reicnto.
Con la situación fuera de control, personal de seguridad liberó las rampas que conectan hacia la cancha; sin embargo, hubo personas que trataron de perseguir a los jugadores del Atlético de San Luis, para reclamarles el desempeño que los tienen en los últimos lugares.
Por ahora, la Liga MX sólo ha manifestado lo siguiente: «La LIGA BBVA MX informa que, por seguridad y para salvaguardar la integridad de afición y jugadores, el partido entre Atlético de San Luis y Querétaro queda suspendido en el Estadio Alfonso Lastras debido a la falta de garantías para continuar dicho compromiso».