SAN SALVADOR, El Salvador, septiembre 2 (EL UNIVERSAL).- La afición de El Salvador ha reaccionado tarde.
A dos horas de que comience el juego ante México, la gente se ha apostado en las taquillas en busca de un boleto.
Los costos son los mismos, a pesar de que la demanda ha crecido.
Aun así, no se espera que se llene el Cuscatlán. A lo mucho entrarán, dicen los conocedores, 25 mil personas.