Un día después de que el equipo nacional femenil de los Estados Unidos protestara por el uso de lenguaje sexista y misógino en un documento legal que defendía el pago menor de la selección femenil sobre la varonil, el presidente de la Federación de Futbol de los Estados Unidos (U.S. Soccer Federation, por sus siglas en inglés), Carlos Cordeiro, ha renunciado a su cargo.
Cordeiro fungió en su cargo desde febrero del 2018 y llevaba 13 años dentro de la federación.
En un expediente presentado el martes ante una corte federal de Los Ángeles, la federación argumentó que las condiciones hostiles que afronta la selección masculina cuando juega en canchas de México o Centroamérica «no se comparan con nada de lo que la selección femenina debe enfrentar”, además de que «el trabajo de un jugador (de la selección masculina) requiere un nivel más alto de destreza basado en velocidad y fuerza que una jugadora».