Renato Ibarra está dispuesto a ser “moneda de cambio” para que el América tenga a Rubens Sambueza y él se mude al Pachuca.
En la Bella Airosa está todo lo que el ecuatoriano quiere en estos momentos: volver a jugar, su hermano Romario (volante de los Tuzos) y tranquilidad.
Después de que libró los cargos de tentativa de feminicidio contra su pareja Lucely Chalá, mas no el de violencia familiar, lo que más anhela Renato es paz en su entorno, tras lo mediático que se volvió su caso y los insultos de los aficionados en su cuenta de Instagram.
Pachuca tiene la calma que desea, además de la cercanía a la Ciudad de México, porque cada mes debe acudir a los tribunales del Reclusorio Oriente a firmar