El Real Madrid ganó por 0-1 al Sevilla en un partido muy competido y en el que se tuvo que poner el mono de trabajo para cambiar su mala dinámica de dos derrotas seguidas (Alavés y Shakhtar) para coger moral para su cita decisiva del miércoles ante el Monchengladbach para pasar a los octavos de la Champions.
Tras un primer tiempo que los de Zinedine Zidane dominaron por completo, sin materializar sus buenas ocasiones, el segundo fue mucho más igualado porque el Sevilla reaccionó, aunque un solitario gol en propia meta del portero Bono, tras un remate que no iba a puerta del brasileño Vinicius, el mejor de su equipo, a los 55 minutos, le aseguró el triunfo al no acertar los andaluces en su empuje en pos de la igualada