Por tercera vez en los más recientes cuatro torneos, el Monterrey está entre los semifinalistas, logro que reafirma por qué se hizo costumbre considerar a La Pandilla uno de los equipos más poderosos del futbol mexicano. La fórmula fue sencilla: Apuntar al mercado europeo para atraer súper estrellas al plantel.
La gran figura, Sergio Canales, en su primera temporada en México anotó 11 goles y aportó cuatro asistencias, en 25 partidos. Esta campaña, lleva nueve tantos y tres pases para anotación, en 19 encuentros. Basta con ver la eliminación a los Pumas en los cuartos de final para comprobar el efecto que los refuerzos tienen en el equipo.
Canales fue el autor del gol del triunfo en la ida, y en la vuelta, a pesar de ser la primera vez que jugaban bajo el sol de Ciudad Universitaria, Óliver Torres y Lucas Ocampos fueron determinantes, para la goleada (5-3) y el pase a las semifinales.
Va para cinco años de la última vez que los Rayados se proclamaron campeones del futbol mexicano y, en ese entonces, uno de los héroes fue el neerlandés Vincent Janssen, quien llegó al Monterrey directo desde el Tottenham y en la Liguilla del Apertura 2019 anotó en cuartos de final, semifinales y convirtió el primer penalti en la serie definitiva frente al América. El gol del título lo rubricó Leonel Vangioni, quien fue jugador del Milan.
En este tiempo, hubo cambio de directiva, pero el enfoque sigue siendo el mismo: El Monterrey tiene claro su deseo de ser el mejor equipo del futbol mexicano y bajo esa lógica se explican las llegadas de Canales, Torres, Campos, así como los casos de jugadores repatriados (Jesús Tecatito Corona, Omar Govea, Gerardo Arteaga y Héctor Moreno), porque su vista está hacia Europa.