Raúl Gutiérrez, se juega la vida el próximo jueves en el estadio Morazán de San Pedro Sula, Honduras.
El técnico mexicano, mandamás en el Real España de la Liga catracha jugará el partido de vuelta por el título, con una desventaja de 2-0 frente al Olimpia que dirige el argentino Pedro Troglio.
El Potro, de coronarse, sería el segundo técnico de sangre atlantista en ser campeón en menos de una semana, después de lo logrado por Mario García, quien ganó el título del Apertura 2019 para los Potros el pasado dominio.
En el juego de ida celebrado, Gutiérrez tuvo la ausencia de uno de los pilares de su equipo, Ramiro Rocca, quién fue víctima de un resfriado. Se creyó que el delantero argentino tenía Covid-19, lo que al final fue descartado.
Sobre la serie final, Gutiérrez dijo: «El futbol es muy caprichoso en todo sentido. Ellos aprovecharon la localía y nosotros hicimos un partido muy desconectado. La vuelta será compleja. Dicen que el 2-0 es el marcador más engañoso y yo no comparto, pero por situaciones de voltereta se ha hecho ese dicho. Tenemos que dar la cara, hacer un partido distinto, mostrar el escudo del Real España en el pecho como debe de ser y defenderlo como debe ser».
La directiva ha manifestado que sea cual sea el marcador de la final, Gutiérrez seguirá como técnico del Real España.