El Universal
Daba lo mismo si eran los Gallos Blancos, el Atlante o hasta el Tampico Madero. Fungir como local en Querétaro era sinónimo de tragedia… Hasta que el plantel dirigido por Víctor Manuel Vucetich dio un vuelco a la historia.
Es por eso que la sonrisa de los finalistas se acentúa más. Los integrantes del Querétaro, versión Clausura 2015, presumen haber fulminado la maldición de la plaza, incluido el estadio La Corregidora, y prometen demostrarlo el domingo por la noche, con una histórica vuelta olímpica.
“Todos sabemos la historia del Querétaro y los jugadores estamos aquí para cambiarla”, sentencia el arquero Tiago Volpi. “Queremos hacer de los Gallos Blancos, un equipo nuevo, con otra historia, y eso comienza con los partidos de la final”.
“Sabemos que se habla mucho de La Corregidora, pero estamos enfocados en levantar la Copa”.
Con lo que sería confirmada la nueva era queretana. No más preocupaciones por el temor a descender. Sueñan con que, jugar finales, se haga hábito.
“Se ha cambiado la historia, pero todavía podemos hacer más”, sentencia el volante William da Silva. “Está complicado, vamos a enfrentar partidos muy duros contra Santos, que tiene a un entrenador [Pedro Caixinha] que conoce mucho de futbol, pero tenemos mucha calidad, un gran director técnico y jugadores que tienen gran experiencia en estos partidos, como Sinha, Ronaldinho y Ricardo Osorio”.
“Todos hablaban de que íbamos a pelear por el no descenso en el próximo campeonato y nosotros, con la mano de Dios, tuvimos fuerza para salir adelante. Necesitábamos ganar siete de ocho partidos [en la fase regular]… Y se nos dio. Para muchos, el domingo todavía tenía que pasar un milagro para clasificarnos, y ahí está”.
Suficientes ejemplos para creer que todo ha cambiado. La macabra historia de la franquicia, que ha descendido tres veces, es ya un oscuro recuerdo. Los Gallos Blancos se visualizan con el trofeo. Sí, en la supuestamente maldita cancha de La Corregidora.
“Nadie daba algo por nosotros. Hubo un momento en el que se platicaba la meta de hacer 20 puntos para no pelear por no descender el siguiente torneo… Una cosa de locos”, recuerda el atacante Ángel Sepúlveda. “Cierras de una manera impresionante, empiezas a soñar. En el momento que clasificamos a la Liguilla y se nos dan los resultados, sabes que es otro torneo, con ocho equipos que van a pelear por ser campeón y te la juegas”.
“Al entrar, sabemos que tenemos la capacidad para salir campeones”.
Los líderes Tigres y el goleador Pachuca sucumbieron ante el hambre del Querétaro. Sus futbolistas han decidido marcar un parteaguas y prometen no fallar a la hora cero.
Emocionado, Antonio Naelson ‘Sinha’ confiesa sentir “mucha alegría, satisfacción, agradecimiento a toda la gente que ha trabajado para que eso pudiera suceder”.
“Ha sido un club que tiene una historia de mucho sufrimiento, pero hoy en día estamos gozando de algo bonito, importantísimo para todos”, complementa. “Ojalá podamos ponerle la cereza al pastel”.
Les permitiría escribir la página más gloriosa en la historia del equipo, pero ellos anhelan que sólo sea el prólogo de una fantástica aventura.