Hace unos cuantos meses, la directiva del Monterrey movió cielo, mar y tierra para adquirir al delantero marfileño Aké Loba, quien venía de algunos buenos torneos en el Querétaro y era pretendido por el Cruz Azul.
A punta de billetazos, los Rayados se lo quedaron, aunque nunca quedó muy claro si realmente lo necesitaban, al tener a futbolistas como Rogelio Funes Mori, Vincent Janssen y hasta Avilés Hurtado.
Hoy, parece que la teoría de que sólo buscaban que otro candidato al título no lo tuviera se ha comprobado.
El africano no se adaptó y el Monterrey está dispuesto a prestarlo; eso sí, a un equipo que no luzca como rival en pos de la corona, así es que las opciones son el Necaxa, los Pumas y el Atlas.