Puebla y León entregaron en la cancha del Estadio Cuauhtémoc un juego lleno de emociones y goles que después de noventa minutos terminó (5-4)
Los poblanos tuvieron una noche de ensueño en casa y con un Guillermo Martínez como protagoniza principal que los ilusiona para llegar a la fiesta grande.
La Fiera con el silbatazo inicial se mostró en la Angelópolis más fuerte, teniendo rápidamente la oportunidad de irse al frente en el marcador.
Los esmeraldas aprovecharon las facilidades defensivas y de los pies de Federico Viñas encontró el primero de juego al 10′.
La anotación cayó como balde de agua fría a los locales, que con sus limitaciones se lanzaron al ataque y tuvieron frutos con una jugada colectiva que mandó al fondo Guillermo Martínez al 19′.
Con la anotación del empate, Puebla replegó y concedió el balón a los visitantes, mismos que no desaprovecharon y en la recta final ampliaron el marcador en dos ocasiones.
Primero de los pies de Nicolás López, que mandó el esférico al fondo tras una asistencia de Ángel Mena al 44′ y después con un remate de cabeza de Federico Viñas, que completó su doblete al 45+1′.
Ya en la parte complementaria Puebla se lanzó al ataque y rápidamente volvió al juego con el segundo tanto de Guillermo Martínez, quien de cabeza acercó a los poblanos al 50′.
La anotación camotera sacó los mejores minutos de los locales, con oportunidades claras sobre la meta de Rodolfo Cota, que no pudo evitar el empate en una jugada a balón parado.
La Franja aprovechó un tiro de castigo para con un remate de Diego de Buen encontrar el empate al 80′.
Anotación que encendió a la grada y llenó de energía a los enfranjados, que con el último suspiro encontraron el triplete de Guillermo Martínez y tres puntos de oro al 85′.
Con el aparente triunfo en la bolsa León volvió al ataque y encontró el empate con Omar Fernández al 89′, pero segundos después Puebla atacó y con gol de Sansores definió el partido al 90+5.