El Universal
Su padre se encuentra ahí, a un costado. Con un teléfono celular, graba orgulloso las últimas palabras del hijo en Verde Valle. Marco Fabián se presenta en la sala de prensa para despedirse. Minutos antes, la directiva de Chivas acababa de oficializar su traspaso al Eintracht Frankfurt de Alemania.
El volante se va porque así lo quiso. Era su oportunidad. La había negociado con el club desde que regresó del Cruz Azul, donde pasó un año a préstamo. Por eso, no la dejó pasar. Europa era su sueño. Hoy es una realidad, luego de que su nuevo club pagara la cláusula de rescisión: 4 millones de dólares.
“Hoy es un día inolvidable, lleno de sentimientos, en el que me despido de este club donde crecí, al que llegué a los seis años de edad. Hoy se cumple un ciclo. Estoy feliz, tranquilo y comprometido. Muy agradecido con Jorge Vergara, Jaime [Ordiales], José Luis [Higuera], todo el cuerpo técnico por el esfuerzo que hicieron para dejarme salir. Este es mi sueño”, explica.
Mira constantemente el reloj. La conferencia se citó a las 15:00 horas. A las 17:30 sale su avión al Distrito Federal y por la noche el vuelo a Alemania, donde este sábado está programado que realice los exámenes médicos correspondientes. Lleva prisa. Pero en su mirada, la felicidad supera la nostalgia del que parte para no volver.
“Más que sufrir, sabía que el momento se me iba a dar solo. Como dije siempre: no era una obsesión, sabía que iba a llegar. Siempre trabajé con compromiso y hoy llega en un momento difícil quizá, por las circunstancias [Chivas peleará el descenso], pero el tren pasa una vez y decidí subirme en él”, sentencia el futbolista de 26 años.
Confía, ahora como ex rojiblanco, en que la suerte cambiará para el Rebaño Sagrado. “Llega en un momento difícil, pero no es que quiera abandonar al equipo y menos el club de mis amores. Simplemente, si no es ahora, no sé si vuelva tener una oportunidad similar. Tomé la decisión de salir con el apoyo de Chivas y el cuerpo técnico. Estoy agradecido y al final la decisión es mía”, asevera.
“El contrato es cosa de los dirigentes y mi promotor. Se renovó ese contrato poniendo esa cláusula [de bajar el precio de 8 millones de dólares a la mitad para un club extranjero] apostando a que llegara algún momento. Nunca dejé de dar lo mejor de mí por estos colores, siempre fui un jugador comprometido, a veces salía bien, a veces no, pero siempre di lo mejor. No tengo otro equipo en mente: si algún día regreso a México, me gustaría regresar aquí”, añade Fabián.
Revela que ya ha tenido contacto con Javier ‘Chicharito’ Hernández. “Es uno de mis mejores amigos”, recuerda. También Pável Pardo le ha orientado sobre lo que encontrará en la Bundesliga. Por lo pronto, se va del Guadalajara tranquilo. Asegura que lo hace sin deudas, pese a que no pudo ser campeón de Liga.
“No. La realidad es que cuando dejas una deuda es cuando crees que en algún momento no hiciste bien las cosas o te vas con la sensación de que algo dejaste de trabajar, pero me voy consciente de que di todo por este equipo. Las circunstancias no se dieron para levantar un trofeo de Liga, gracias a Dios se me dio el campeonato de Copa MX, pero la vida continúa, ahora voy a tratar de hacerlo en otra Liga, con otro equipo… y bueno, quién dice que el sueño no sigue, quizá algún día regrese y pueda cumplirlo”, afirma el sonriente futbolista del Eintracht Frankfurt.
Al final, se va feliz. Es hora de alcanzar el avión que lo llevará a cumplir su sueño. El padre, orgulloso, ha registrado cada palabra en el teléfono móvil. La última grabación de Marco Fabián en Verde Valle. Alemania es su destino. Las “otras propuestas” nunca existieron.