El Universal
Agustín Marchesín salió cabizbajo del Estadio Azteca. Caminó solo hacia afuera del recinto, sin muchos ánimos, luego de haber sido el gran villano de Santos y, por consiguiente, el “héroe” del América en la semifinal de vuelta de la Liga de Campeones de la Concacaf.
Un error suyo, ante un tiro de rutina de Michael Arroyo, marginó a los Guerreros de poder disputar el boleto al Mundial de Clubes para cederle ese derecho a las Águilas. Salió como un héroe abatido del ‘Coloso de Santa Úrsula’
Obviamente está golpeado, pero errores los cometemos todos y ganamos y perdemos como equipo. Él siempre ha sido clave cuando ganamos y es un grandísimo portero”, explicó Carlos Izquierdoz, defensa lagunero y compatriota del guardameta argentino.
“Agustín es alguien que nos salva todo el tiempo y a uno como defensa central le gusta tener un portero así. No pasa nada, es un gran jugador, hay que pensar en Veracruz, nuestro siguiente partido, y en llegar a la Liguilla”, complementó el también zaguero Néstor Araujo.
Marchesín había tenido una noche que se perfilaba memorable con siete atajadas, según estadísticas oficiales de la ‘Concachampions’. Pero vino su pifia. El esférico se le escurrió de las manos al minuto 101 del primer tiempo extra. Su gran partido se derrumbó.
El guardameta de los Guerreros de inmediato aceptó la culpa con sus ademanes. Echó la cabeza hacia atrás y cerró los ojos como señal de resignación ante el yerro
Su técnico, Luis Zubeldía, trató de restar importancia ante el infortunio de su pupilo. Lo defendió con tesón, porque sabe de su valor, más allá de que su acción le marginara de la final de la presente Liga de Campeones de la Concacaf.
A Marchesín lo conozco hace mucho tiempo. Tuve la suerte de tenerlo en Lanús y el recuero lindo de haberlo hecho debutar cuando en el club no atajaba un arquero de divisiones formativas”, declaró el estratega albiverde.
Liberó de culpas a su portero: “Con lo que ocurrió en el partido ante el América, no tiene mucho sentido [hablar], se gana y también se pierde en equipo. Sin duda debemos tener la capacidad de aprender esta situación”, analizó el técnico de Santos Laguna.
‘Marche’ agradece apoyo. Supo de inmediato que su error fue costoso. Agustín Marchesín recibió críticas, pero también el respaldo de su fanaticada, y lo agradeció.
”Muchas gracias por el apoyo de todos, no saben cuánto se los agradezco. Esto sí es una gran familia y de acá [Santos], no me voy porque acá quiero estar”, compartió el meta argentino en su cuenta oficial de Instagram, acompañado de una fotografía suya rezando
“Me fui de Lanús con mucho dolor por lo que significaba y sin ganas de irme, y hoy me encuentro con algo increíble. Me hacen sentir como en casa realmente, gracias de corazón, siempre tratando de dar lo mejor, con aciertos y errores, pero siempre lo mejor por lo que me dan, por abrirme sus puertas y por hacerme sentir tan especial. Muchas gracias”, abundó ‘Marche’.
La noche aciaga que vivió el portero lagunero en el Estadio Azteca lo marcó. Un error suyo le dio una alegría al americanismo.