Luis Suárez es sin duda uno de los jugadores más importantes de continente, un hombre letal en el área que marcó un antes y después en con la Selección de Uruguay y el FC Barcelona.
Pero, no todo es sencillo para el exjugador de Gremio y quien se rumora podría llegar en los próximos meses a la MLS para jugar con Lionel Messi.
Ya que con el paso del tiempo las lesiones llegan y una de ellas es la artrosis, misma que encuentra provocando un gran dolor, que requiere de inyecciones constantes.
«Los días antes de cada partido me tomo tres pastillas y horas antes de jugar me inyectan. Si no, no puedo jugar. De ahí la renguera».
En ese sentido, Suárez dejó en el aire el poder seguir jugando, reiterando que con el ritmo actual de competencia y su proceso médico, no podría realizar actividades más adelante».