El mexicano Luis Romo fue el protagonista celeste, al marcar el único tanto en la final de ida del Guardianes 2021, el cual acercó al Cruz Azul a su noveno título de Liga MX.
La anotación hizo vibrar a cada aficionado celeste, ya fuera en el estadio Corona o en cualquier parte del país, y fue firmado por un jugador que regresó a La Máquina cuando años antes lo habían cortado de fuerzas básicas.
Cuando el sinaloense tenía 15 años de edad, el club le notificó que no seguiría en La Noria, por lo que buscó un lugar en Querétaro, donde se consolidó como futbolista, le marcó un par de tantos al Cruz Azul en el Apertura 2019 y fue contratado para el Clausura 2020.
A pesar de que Romo solo estuvo ocho meses en las inferiores de La Máquina, se encariñó con el club, por lo que cuando lo buscaron para regresarlo, no dudo en firmar el contrato. Nunca sintió rencor por el escudo celeste, al contrario.
Pasaron nueve años para su retorno a La Noria, sin el conocimiento de que sería el protagonista en la ida de la final que puede entregarle a la afición, directiva, jugadores y socios cooperativistas el festejo que tanto han esperado desde aquel Invierno 1997.
Incluso, con su fichaje como cementero, Romo se ha convertido en un regular para Gerardo Martino en la Selección Mexicana y su nombre suena muy fuerte para ser uno de los tres refuerzos de Jaime Lozano en los Juegos Olímpicos de Tokio.