La posibilidad de que Renato Ibarra se quede en el América es mínima, ya que depende de la directiva azulcrema, encabezada por su propietario, Emilio Azcárraga.
El mismo entrenador de las Águilas, Miguel Herrera, dejó el futuro del ecuatoriano en manos del empresario y Santiago Baños, presidente del club.
Ibarra saldría de Coapa, tras su escándalo de presunta violencia familiar en el que se vio involucrado hace un par de meses y que lo llevó al Recluosorio Norte y Oriente. A pesar de ese incidente, algunos equipos de la Liga MX estarían dispuestos a contratarlo para el Apertura 2020.
El primero que trascendió fue Cruz Azul, que desde que estaba Ricardo Peláez al frente del proyecto cementero buscó al sudamericano. Sin embargo, La Máquina ha intentado deslindarse del interés sobre el volante derecho.
El América lleva un par de torneos en contacto con el Querétaro para amarrar a Marcel Ruiz, perla de los Gallos Blancos, pero no ha podido cerrar el trato. Ibarra serviría como moneda de cambio.
El Monterrey, actual campeón del futbol mexicano, también podría ir por Renato. Otra opción, Toluca.
El ecuatoriano se mantiene en los trabajos del América durante el freno de actividades del Clausura 2020. Todos los días está presente en las reuniones de zoom con el preparador físico, Giber Becerra. Ibarra quiere volver a jugar y dejar atrás esa semana oscura preso.