CIUDAD DE MÉXICO, agosto 8 (EL UNIVERSAL).- Lobos BUAP rescindió el contrato a William Palacios, jugador que según el comunicado del club, provocó una riña en estado inconveniente, mientras que a su compañero, el goleador del equipo Julián Quiñones, sólo lo castigará.
El cuadro poblano no sólo estaría en problemas dentro del campo por estas distracciones, sino también fuera de éste al incumplir con lo que dicta la Ley Federal del Trabajo (LFT).
«Los futbolistas son trabajadores reconocidos por la LFT y tienen los mismos derechos que cualquier otro trabajador», dice Ricardo Galicia, abogado especialista en Derecho Deportivo.
El Artículo 47 de la LFT habla de las causales de rescisión de relación de trabajo sin responsabilidad para el patrón; en este caso, Palacios no estaba incumpliendo con su contrato. La causal XIII de dicho artículo hace mención al estado de embriaguez, pero dicha causal no argumenta que tenga validez fuera en horario laboral.
«Ningún contrato puede estar por encima ni en contra de lo que dice la LFT», añadió Galicia, quien dice que si el reglamento interno de Lobos estuviera registrado en una junta laboral, sólo podría sancionar a Palacios con uno a ocho días sin goce de sueldo.