Con cinco triunfos consecutivos (tres en Liga MX y dos de Copa), las semanas en las que el Guadalajara tropezaba semana a semana han quedado en el olvido.
Tras estar sumergido en los últimos puestos de la tabla general, el Rebaño suma 10 puntos, que a esta altura del torneo (Jornada 8), los mantiene como contendiente a la Liguilla.
No ha sido una varita mágica la que ha provocado el resurgir del conjunto tapatío; el volante Isaac Brizuela señaló que los buenos resultados son producto del buen juego con el que empezaron el campeonato.
“Creo que las primeras jornadas no lo habíamos hecho mal, habíamos jugado bien, lamentablemente no llegaban los resultados, no nos acompañaban, el equipo siguió por la misma línea, confiamos y lo hablamos, que seguir jugando como lo estábamos haciendo nos ponía más cercanos a tener una victoria y fue la mentalidad de todo el plantel. El cuerpo técnico también merecía estos triunfos”, dijo Brizuela.
La defensiva del equipo que dirige José Saturnino Cardozo se ha amalgamado al punto de que la Liga suma cuatro encuentros sin recibir anotación, mientras que la delantera está logrando la contundencia de la cual careció en la primera parte del torneo.
“Veníamos trabajando de muy buena manera y liberamos un poquito de tensión. Los últimos días han sido muy importantes para nosotros. Todo esto nos encamina para lograr los objetivos que teníamos planeados”, acompañó el Conejito Brizuela.
En una semana, Guadalajara consiguió tres triunfos gracias a la fecha doble: Veracruz, Necaxa y Atlas, sus víctimas. Mañana se presenta en casa frente a Pachuca en búsqueda de su segundo triunfo de local.