El Guadalajara nació grande, hizo historia, se convirtió en un club poderoso. Pero toda grandeza lleva obligación y en el Rebaño lo saben. A pesar de seis torneos sin clasificar a las finales, de luchar contra la corriente frente a clubes de mayor poder económico, la misión todos la saben: “Hay que ir por el título, hay que entrar a una Liguilla”, de nueva cuenta.
Obligación sin distinción. Hay que reponerse rápido, hay que levantarse sin sacudirse la ropa. El Guadalajara fue vapuleado por los Tigres en el pasado juego de la Copa Por México, evidenciando muchas carencias, y eso en lugar de desmoralizar, debe ser un reto para primero superarse a sí mismos y después a los rivales en turno.
Por eso, ratifica Isaác Brizuela: “En Chivas no jugamos amistosos, aquí eso no existe, aquí siempre queremos ganar, y eso habla del compromiso que hay en el equipo”.
El Conejito ya es todo un veterano en el Rebaño, lleva seis años en el equipo, y conoce la obligación, la presión que hay sobre su espalda: “Mi objetivo es estar bien con el equipo, mantener un buen nivel y ser titular. Debo entrenar bien todos los días, jugar mejor en cada partido. Si en tu club estás bien, pueden abrirse oportunidades en Selección y, si se llega a dar, aprovechar y quedarme”.
A sus 29 años de edad, podría decirse que las oportunidades de Brizuela casi se han extinguido, pero no, el oriundo de Lagos de Moreno ve hacia adelante, aún tiene muchos objetivos por cumplir: “Hay jugadores que han llegado a Europa a esta edad. Es un sueño que se tiene desde niño, me haría muy feliz, pero vivo el presente y estoy muy contento en esta institución que me ha dado mucho”.
El pensamiento de obligatoriedad no es sólo de los veteranos, también la sangre joven tiene compromiso, tiene obligación, sabe que la Nación Chiva ya no aguanta otro torneo sin finales: Gilberto Sepúlveda, el novel central del Guadalajara, admite que la Copa por México la toman con la mayor seriedad posible. “La tenemos muy clarita, para Chivas cualquier partido amistoso o torneo de preparación lo tomamos con la mayor seriedad posible, siempre queremos ganar”.
Mas el llamado Tiba pide que no se pierda de vista el hecho de que en la Copa por México se busca afinar detalles. “Queremos ganar el torneo, pero no deja de ser de preparación”.
Después de la derrota ante los Tigres (0-2), se nota que el Guadalajara tiene mucho trabajo por hacer… “Paramos casi cuatro meses, nos falta entrar en ritmo, pero no estamos lejos de las expectativas propias. Hemos tenido buenos entrenamientos, hay que encontrar el ritmo”, porque para Chivas hay obligación.