El argentino Gonzalo Higuaín, nuevo delantero del Chelsea, puso fin este miércoles a una trayectoria de cinco años y medio en la Serie A italiana, con dos títulos ligueros, el récord histórico de goles en una temporada (36) y un final amargo, tras una decepcionante experiencia en el Milan.
Los últimos seis meses de Higuaín en Italia estuvieron marcados por los disgustos, a nivel personal y técnico, y el «Pipita» decidió buscar refugio en el Chelsea, el equipo en el que se volverá a juntar con su exentrenador en el Nápoles y mentor, Maurizio Sarri.
El delantero argentino, de 31 años, que empezó el año cedido en el Milan y cuya ficha pertenecía al Juventus, vestirá la camiseta del Chelsea hasta final de temporada, tras cerrar el conjunto turinés y el londinense un acuerdo que prevé la cesión de seis meses y una opción de prolongación para otra campaña.
La incorporación de Higuaín al Chelsea se produce tras un momento muy complicado para el argentino, que en pocos meses pasó de ser el líder absoluto del Juventus, vigente campeón de Italia, a ser el primer nombre en la lista de las salidas.
El fichaje del portugués Cristiano Ronaldo por el cuadro turinés obligó al Juventus a liberar espacio en el presupuesto económico e Higuaín, que tenía una ficha de unos 8 millones de euros por año, fue cedido al Milan por 18 millones de euros más una opción de compra a final de año fijada en otros 36 millones.
Se sintió «echado» Higuaín, tal y como admitió el futbolista en una entrevista del pasado otoño, y pese a las ganas de revancha que tenía hacia el Juventus, su relación con el Milan nunca terminó de despegar.
El comienzo de año fue globalmente positivo, con seis goles en sus primeros ocho partidos, entre Serie A y Liga Europa, pero algo se rompió el 11 de noviembre, cuando el Milan perdió 0-2 en casa contra el propio Juventus.
Ese partido estaba marcado con una «equis» en el calendario de Higuaín. Debía ser la vitrina en la que demostrar a su exclub que su cesión había sido un grave error. Sin embargo, ese partido terminó hundiendo al argentino.
Cristiano Ronaldo marcó, el Juventus ganó e Higuaín falló un penalti, antes de terminar expulsado por protestar muy duramente al colegiado en el tramo final del encuentro. El Juez deportivo le sancionó con dos partidos de suspensión y el «Pipita» no logró levantarse de ese disgusto.
Vivió una sequía goleadora de seis partidos, con eliminación en la fase de grupos de la Liga Europa incluida, y la lluvia de críticas que le cayó encima le llevó a tomar la decisión de abandonar el proyecto del Milan en enero.
El técnico de los milaneses, Gennaro Gattuso, intentó convencerle, pero el argentino prefirió poner fin a su experiencia italiana y volver a juntarse con Sarri, un técnico que puede garantizarle confianza y apoyo en el momento seguramente más delicado de su carrera.
Y es que la trayectoria italiana de Higuaín había sido hasta este verano muy positiva, hasta convertirse en historia absoluta en 2016.
Con la camiseta del Nápoles, y con Sarri en el banquillo, el «Pipita» batió el récord de goles del sueco Gunnar Nordahl (35), al anotar 36 dianas en 38 partidos, una marca que resistía desde hace 66 años.
Dos años después de tocar la cumbre más alta de su carrera, y tras ganar dos títulos ligueros con el Juventus, Higuaín se va de Italia como un coloso herido, decidido a relanzar su carrera en la Premier League.
En el Chelsea contará con una plaza de titular asegurada y con la posibilidad de volver a competir en la Liga Europa, en uno de los clubes potencialmente favoritos para el triunfo final.