La soberbia de Gerardo Martino parece que se acaba ante la crisis que vive la Selección Mexicana.
Martino aceptó que el juego fue malo y que se equivocó de inicio a fin. “Aunque la responsabilidad es de todos”.
Aceptó Martino, después del empate de México a cero goles ante Costa Rica.
“El partido en líneas generales de México fue malo, sobre todo en el primer tiempo, en el segundo corregimos, en los primeros 25, pero en líneas generales jugamos mal. El partido contra Panamá es una final, lo era antes, lo es ahora y quizá más. Evidentemente es un juego que vale la plaza en el Mundial”.
Costa Rica vino a defenderse, pero eso ya lo sabía: “Está claro que los rivales vienen con postura defensiva, con Jamaica fuimos más dinámicos, hoy no sucedió. Hemos perdido frescura en la posesión de pelota, cuando la tuvimos fue poco productiva”.
Asegura que no se sintió defraudado por sus jugadores: “No, para nada, son juegos que se dan, fue una mala noche de todos, hasta de mis decisiones, desde lo inicial hasta lo que hice a lo largo del partido. Carecimos de idea en todo el juego”.
Pero reiteró: “Esto es una responsabilidad de todos. Yo me siento respaldado, tanto en las buenas como en las malas”.
Quizá las triples Fechas FIFA, sean el problema: “Cambiamos muchos futbolistas, había cuatro o cinco jugadores frescos, es una obligación cuando hay juegos tan seguidos que provocan tanto cansancio, ver cómo sostener frescura, pero no lo logramos”.
A pesar de que el público fue un grupo controlado, alguien grito: “Fuera Tata”…, y Martino lo escuchó: “Cuando un equipo tiene una expresión futbolística como la de ahora, hay reprobación de la gente hacia el entrenador. El compromiso es mejorar”.
Ahora viene Panamá, y aunque podría darse una postura igualmente defensiva, cree que será de otra forma: “No descarto que Panamá venga de la misma forma, pero también es verdad que tiene una generación de futbol diferente… No descarto nada”.