El Universal
Si el estadio Olímpico de los Juegos de Río 2016 sufría por falta de agua desde hace unos días, desde ayer se sumó la falta de luz. El corte que sufre el también nombrado estadio Nilton Santos de estos servicios se debe a que tiene una deuda de casi cuatro millones de pesos (3 millones 950 mil 877 pesos).
Esto tiene inquieto al comité organizador, que suma otra preocupación a la larga lista de pendientes por arreglar para tener todo en regla de cara a la justa deportiva que tendrán en el mes de agosto.
El club Botafogo de futbol, equipo brasileño que tiene como casa la sede en donde se realizarán las competencias de atletismo, culpa a la prefectura de Río de Janeiro. En tanto, el pasto del ‘Engenhão’ ya se empieza a marchitar.
Busca alturas internacionales
Aunque a la clavadista de altura Adriana Jiménez le encanta entrenar en su país, ha contemplado seriamente la posibilidad de prepararse fuera de territorio nacional, ya que en México no existen suficientes escenarios propicios para saltar desde una plataforma de 20 metros de altura.
La seleccionada, cuarto lugar en el Mundial realizado en Kazán a mediados de año, quiere emular a su compatriota Jonathan Paredes, doble medallista del orbe en la misma especialidad y para ello contempla la idea de prepararse en países como Estados Unidos o Australia. El objetivo de Adriana es optimizar su rendimiento deportivo, pues en México el único lugar en el que puede saltar desde tan alto es el estado de Chiapas
A Valdés le urge actividad
No es nuevo que Víctor Valdés suene para arribar al futbol mexicano. Y es que, según nos cuentan, su representante Gines Carvajal está desesperado por colocarlo en algún lugar del mundo debido a su nula participación en el Manchester United de Inglaterra por claras diferencias con el técnico holandés Louis Van Gaal y lo ofrece en todos lados, lanzando dardos para ver cuál pega. Si Cruz Azul se atreve a contratarlo, aún teniendo a José de Jesús Corona en la plantilla, deberá desembolsar alrededor de 11 millones de dólares anuales de sueldo, nada menos, pues está dentro de los porteros que más ganan en el mundo. La ficha del guardameta tiene un valor de 7.5 millones.