Al Independiente de Argentina le pasa lo que a Pedro con el lobo.
El vicepresidente Pablo Moyano vino a reunirse con varios directivos de la Liga MX, ofreció jugadores para negociar y pagar deudas con el América y los Pumas.
Sin embargo, el pasado reciente del Rojo, que pasa por una crisis económica, puso a dudar a los clubes, que ya piensan dos veces antes de pactar algo con los sudamericanos.
Los adeudos y demandas no son buena imagen para el Independiente, que quiere usar a la Liga MX como una oportunidad para recuperar dinero.
Es por esto que los conjuntos tricolores no han mordido el anzuelo.