Un regalo del árbitro ayudó a los Tigres a romper la racha de cinco juegos sin perder contra Puebla.
Victoria de 2-1 de los regios frente a unos poblanos que cayeron con la cara al sol, que hicieron juego, pero no fue suficiente al final.
Los felinos llegan a ocho puntos y amanecerán como líderes generales. Los de LA Franja pierden el invicto, pero no la dignidad, se quedaron con siete puntos. Triunfo, pero manchado, porque el VAR les dio un regalito.
Apenas al minuto cinco, Javier Aquino se trompicó con Néstor Vidrio, Erick Yahir Miranda fue al VAR, y marco penalti, muy discutido, penalti que André-Pierre Gignac hizo gol, su gol 129 como Tigres y el sexto que le hace a La Franja.
EL gol puso “grogui” a los poblanos, que cuando se dieron cuenta ya tenían el segundo adentro, este se Eduardo Vargas, el chileno llegó a 41 tantos como felino y le marcó su quinto tanto a los camoteros.
Puebla tardó en recuperarse, pero cuando lo hizo puso en serios problemas a los Tigres con dos jugadas que pusieron a sus delanteros frente a frente a Nahuel Guzmán quien salió avante.
Para la segunda parte, Puebla salió por la suya, el equipo de Juan Reynoso le echó corazón, peor también buen futbol. A los 57’, Santiago Ormeño acercó a los de La Franja con un remate con la cabeza. Tigres quiso controlar el juego, manejarlo a su manera, pero Carlos Salcedo volvió a jugar en contra a su equipo y se hizo expulsar.
La Franja fue con todo y Nahuel comenzó a agrandarse, a realizar las atajadas heroicas y salvar la victoria.