CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 2 (EL UNIVERSAL).- En los pasillos de la Federación Mexicana de Futbol circula la versión de que el último juego de eliminatoria mundialista, el cual es en contra de Trinidad y Tobago en octubre, ya no se celebrará en el estadio Azteca.
Esto es por varias razones. La primera es para refrescar a la afición, esto tras la pésima entrada que hubo contra Panamá ayer viernes.
La segunda es promocionar más al estadio Bancomer, ubicado en el municipio de Guadalupe, Nuevo León, como sede mundialista, además de que el lleno estaría asegurado por la fanaticada regiomontana.
Esto es una idea que se esboza en la FMF