El chileno Manuel Pellegrini ha comentado este lunes, en su presentación como entrenador del Betis, que es «un placer tener la oportunidad de venir» a un club con el que «había tenido contactos con anterioridad y, por distintos motivos, no se pudo concretar».
Pellegrini ha asegurado que el Betis «es un club tremendamente popular» que cuenta con «un plantel con una exigencia alta» en el que tiene «mucha confianza: hay un buen grupo de jugadores» cuya obligación es «estar luchando por las competencias europeas» y al que espera «devolver con trabajo todo el cariño recibido», dijo.
El técnico sudamericano coincide con los análisis que indican que «la cantidad de goles recibidos han sido demasiados para un equipo con aspiraciones», por lo que debe «empezar en pretemporada un trabajo nuevo, pero con una base realizada», si bien deberá construir «un proyecto más equilibrado».
Pellegrini espera reforzarse en un mercado que será «atípico» y en el que habrá «jugadores que saldrán por distintas circunstancias», pero de momento «no es factible hablar de nombres propios», sino «empezar un trabajo diario para acercar» al Betis «a lo hecho por otros clubes».
El nuevo entrenador verdiblanco, que dirigió en Málaga a Joaquín Sánchez, el capitán del equipo, dijo que la carrera del portuense «se valora por sí sola» y está «muy feliz por volver a dirigirlo», ya que es un futbolista que «no sólo aporta su experiencia, sino su personalidad, que es especial y alegre».
Pellegrini también dijo estar «feliz» por el reencuentro con «Juanmi, Javi García o Canales», futbolistas hoy del Betis y a los que dirigió en los diferentes equipos en los que ha estado.
El técnico chileno espera que el Betis tenga en breve «un director deportivo que el club necesita» y del que carece en la actualidad porque «sin hablar de nombres propios», esta figura «debe existir para el correcto funcionamiento de las instituciones».
Pellegrini intentará que su Betis «sea un equipo atractivo», pero cree que «para jugar bien, primero hay que ganar», si bien espera que «la gente no venga a ver al Betis ganar 1-0», sino que contemple a un «equipo marque goles, que sea ganador y ‘gustador’ también», opinión en la que coincide «plenamente con la directiva».
El preparador verdiblanco, que no quiso dar detalles sobre la identidad de sus asistentes, dijo que «tenía intención de seguir dirigiendo en Europa tras salir del West Ham» porque está «entero físicamente como para poder» cumplir los tres años de contrato y «entregarle todo a una institución como el Betis».
El presidente del Betis, Ángel Haro, ha comentado por su parte que ha «optado por un técnico contrastado» para sustituir al fracasado Rubi, «con un bagaje importante a sus espaldas» y cree que el club bético «maximiza las opciones de éxito con Manuel» Pellegrini.
«Tenemos un buena plantilla hombre por hombre, pero necesitamos liderazgo para que la tónica habitual sea ganar. Es una llegada avalada por una cantidad ingente de información. La exigencia debe ser parte de nuestro día a día porque ganar ya no es una opción, debe ser una obligación», ha añadido Haro.