Última parada de la Selección Nacional en la Copa Oro. Después de casi 15 mil kilómetros recorridos desde que salió de la Ciudad de México, para el primer amistoso en Atlanta, el equipo que dirige Gerardo Martino ha ido y venido a lo largo de la Unión Americana, con un cambio constante en husos horarios, aviones compartidos, después aeronaves exclusivas… Todo, con la obligación del título en la Concacaf.
Y el destino los vuelve a poner frente a Estados Unidos. Otra selección que, con Gregg Berhalter, está en reconstrucción y busca igualar a México en campeonatos desde que se instauró el formato de la Copa como lo conocemos en la actualidad (1991).
A pesar de todo el desgaste que han tenido en relación a los viajes y las complicaciones de los últimos partidos, los jugadores mexicanos se mantienen en la dinámica del esfuerzo hasta el último instante.
“Ya habrá tiempo para descansar, estar aquí es un orgullo, y solamente nos quedan 90 o 120 minutos”, comentó el atacante Rodolfo Pizarro.
Además de los viajes y cambios de horario, el cuadro mexicano tiene en contra los dos tiempos extra que le costó clasificarse a semifinales y después a la final. Estirar las eliminatorias ante Costa Rica y Haití podría cobrar factura, aunque Carlos Salcedo aseguró que “si bien ha sido un desgaste importante, no buscamos excusas. Jugamos 30 minutos más otra vez, pero desde antes de iniciar [su participación en el torneo] sabíamos a lo que nos enfrentábamos”.
De las críticas, a pesar de los triunfos, el defensor central añadió que “estamos acostumbrados a eso, lo importante es estar en otra final y ganarla”.
Por su parte, Diego Reyes aseguró que —a pesar del corto tiempo de recuperación entre uno y otro partido—, de los últimos tres, lo importante es que “se están dando resultados, pero el examen final es el domingo”.
Y en ese examen final, ante Estados Unidos en el Soldier Field, la obligación se hace más grande, pero igual dijo el zaguero central, la recompensa es “ganar esta Copa, porque nos vendría bien para seguir consiguiendo confianza en el trabajo con Tata”.