El futbol mexicano está dividido en la cuestión del descenso y ascenso. Este día, vía remota, se llevará a cabo una junta de dueños, en donde se pondrá a votación el cambio de la amiga de Ascenso a Liga de Desarrollo, que lleva como punta de lanza la desaparición del descenso por seis años.
Se espera un buen agarrón, aunque sea por video llamada.
A favor, se habla, hay once clubes, que no quiere decir que sean once votos, encabezados por Santos, pero apoyado por los cuatro grandes: América, Guadalajara, Cruz Azul y Pumas, a los que se les han sumado Toluca, Puebla, Atlas, Tijuana, Querétaro y Morelia.
Del otro lado está el ala opositora con Pachuca y León a la cabeza, pero soportado por los millonarios Tigres y Monterrey, además de Atlético San Luis, Necaxa y Juárez. Al ser de la misma organización: Atlas y Santos deberán contar como un voto, al igual que Tijuana y Querétaro. Del lado del no, Pachuca y León tienen la misma característica, sólo tendrán un sufragio de valor.
Así que el marcador va ocho a favor de que no haya ascenso ni descenso por seis años, contra 5. En las próximas horas seguramente habrá muchas llamadas telefónicas de cabildeo, tratando de convencer a uno y a otro bando.
A las 13 hora se espera que Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, dé una conferencia de prensa al respecto, para al fin saber qué es lo que va a pasar con el Ascenso y el futuro del futbol mexicano durante esta pandemia.