Al Calor Deportivo

“Detener el penalti de Chivas me tiene vivo”

CIUDAD DE MÉXICO, julio 18 (EL UNIVERSAL).- El nudo en la garganta que sufre Héctor Miguel Zelada tiene su origen en la memoria. Recuerda como si fuera ayer, el momento en que le detuvo un penalti a Eduardo Cisneros en la final del siglo ante Guadalajara que encaminó al título al América en la temporada 1983-84.

Y si algún detalle de esa jugada le hacía falta por refrescar en la mente al ex portero argentino, en las pantallas del estadio Azteca se proyectó el sábado en su presencia esa emblemática atajada que alegró al americanismo como nunca. Zelada, nombrado como el mejor guardameta en la historia de las Águilas, se dice conmovido.

“¿Me quieres hacer llorar [al recordar ese penalti]? Me aguanté el llanto [cuando lo vi]. Es el momento cumbre de mi carrera, es una final única, porque no ha habido otra. Dios me dio la oportunidad de ser el protagonista directo de ese campeonato”, describe.

“Siempre me emociona el verla. Por esa atajada estoy vivo futbolísticamente. Significó mucho en lo que fue mi carrera deportiva”, añade.

Zelada también se coronó campeón del mundo con Argentina en el Mundial de México 1986. Sin embargo, el cetro obtenido en el balompié nacional ante las Chivas lo denomina como el mejor pasaje de su vida. No lo duda.