“Se perdió, pero no pasa nada”, dice Nacho Ambriz. “Nos cortaron la racha, pero jugamos bien”, fundamenta el técnico.
Al final: “Esto no es para cortarse las venas”.
Nacho Ambriz no sale dolido de la derrota ante Chivas, o al menos así lo quiere hacer ver. “Teníamos el juego controlado hasta el golazo del Chapo. Reacomodé el equipo para el segundo tiempo, logramos el 2-1, pero bueno, perdemos, no pasa nada. Llevábamos dos años sin perder, siempre llevamos el peso en casa… No pasa nada. Hay que estar tranquilo, pierdes el partido ante un equipo que hizo su juego, muchos vendrán a eso, a que nos equivoquemos, a jugar al contragolpe. Así es esto”.
Aceptó que la expulsión de William Tesillo, condicionó el intento de reacción: “Condicionó porque estábamos más expuestos, ya jugábamos sólo con tres atrás… Pero aún con un hombre menos no nos tiramos atrás. Aplaudo que con diez hombres intentamos jugar. Tampoco es para cortarse las venas”.
La racha de dos años sin perder, 31 juegos son morder el polvo, fue detenida: “Antes del juego les decía a los muchachos que estos dos años sin perder en casa era por defender un estilo, y lo agradecí, pero ahora jugando de esta manera perdimos… No hay nada qué lamentar”.