Dos de los jugadores más icónicos de la era moderna en el futbol mexicano son Hernán Cristante, histórico portero del Toluca y Cuauhtémoc Blanco, uno de los máximos exponentes del balompié azteca, consagrado como ídolo del América y de la Selección Mexicana.
Se enfrentaron en repetidas ocasiones y sus figuras trascendieron la cancha, al grado de respetarse el uno al otro, aunque no siempre fue así. Dentro de la cancha, no existía la amistad.
En el podcast ‘El RePortero’ conducido por Yosgart Gutiérrez, Cristante recordó cómo era enfrentar a Blanco.
«Era un tipo muy complejo, difícil. Los partidos con él eran terribles, en el sentido de que se disfrutaba pero nos decía cosas, era un ganador» confesó el exguardameta argentino.
«No nos llevábamos mal pero hubo un par de partidos que se agarraba con mis defensores y lo cruzaba yo, y él me decía ‘pinche argentino muerto de hambre’, pero siempre hubo respeto con él. Particularmente yo admiraba lo que hacía dentro de la cancha, era un vago del futbol. De esos que uno quiere de compañeros» agregó.