Llegó el momento de la verdad. Después de un comienzo de torneo irregular, Cruz Azul enderezó el camino de la mano de Ricardo Ferretti, quien situó a los celestes en zona de repechaje y ahora, el camino que llevaría a La Máquina a la Liguilla tiene una nueva parada por superar: los Rojinegros del Atlas.
El siempre imponente Estadio Azteca será el escenario para este partido único de repechaje donde se juega por todo y que tiene el riesgo de que alguien se quede con las manos vacías.
El Coloso de Santa Úrsula se convirtió en la fortaleza del conjunto dirigido por el Tuca, ya que desde su llegada al banquillo cementero, su equipo tuvo cuatro victorias y una derrota en condición de local. Nada mal.
A pesar de no tener el cierre de temporada regular deseado (dos derrotas en los últimos tres partidos), Cruz Azul tiene la obligación de sellar su boleto a la llamada Fiesta Grande del futbol mexicano.
A diferencia de Benjamín Mora, quien no contará con el delantero Julio Furch, por haber sido expulsado en la última jornada, Ferretti tendrá a su disposición a todo el plantel para enfrentar este durísimo reto.
La Academia, que en las últimas seis jornadas del Clausura 2023 no conoció la derrota, depositará sus esperanzas ofensivas en Julián Quiñones y Brian Lozano, sus dos máximos goleadores este torneo, debido a la ausencia de Furch; sin embargo, visita un estadio en el cual tiene una sola victoria en cinco años.
Desde el regreso del sistema de repesca a la Liga MX en 2020, Cruz Azul ha disputado tres series de repechaje en condición de local, con un saldo de una victoria, un empate y una derrota. La ocasión que empató con Necaxa le alcanzó para avanzar a la Liguilla, gracias a la definición en la serie de penaltis.