El Universal
El Barcelona se acercó hoy a la final de la Copa del Rey del futbol español al vencer por 3-1 al Villarreal en un partido dominado desde el inicio por el conjunto azulgrana y repleto de errores defensivos en los goles.
El equipo de Luis Enrique se adelantó al final de la primera parte con un gol de Lionel Messi y el Villarreal igualó al comienzo de la segunda mitad con un tanto de Manu Trigueros, aunque el Barcelona reaccionó con los goles de Andréz Iniesta y Gerard Piqué.
La primera parte fue de claro dominio del Barcelona. El Villarreal se replegó mucho, con dos líneas muy juntas, y entregó mucho campo. Además, el equipo azulgrana presionó muy bien, siempre atento a las marcas, y recuperó muy rápido la pelota. Se puede decir que el Barcelona rindió más en defensa que en ataque.
Ante un Camp Nou muy vacío, el conjunto local arrancó el duelo con fuerza y Messi fue el primero en probar a Sergio Asenjo, que respondió bien a un disparo que tropezó en un defensa. El Barcelona dominaba ante un rival muy tímido.
Pero con el paso de los minutos, la intensidad del Barcelona fue disminuyendo para facilitar el trabajo defensivo de los visitantes. El conjunto de Luis Enrique echó de menos los desbordes individuales y una mayor actividad de sus centrocampistas. Luis Enrique hizo retoques en el centro del campo, sumando a Javier Mascherano a una línea de tres que completaron Rafinha e Iniesta. Sólo brilló el argentino, especialmente en el aspecto defensivo.
El Villarreal lo hizo todo bien en defensa hasta el minuto 41. El central argentino Mateo Musacchio erró clamorosamente en defensa, Luis Suárez encaró y asistió para que Messi, llegando desde atrás, marcara con un duro disparo con la zurda. La fe de Suárez, el instinto de Messi y el regalo del Villarreal desequilibraron el duelo.
El resultado pudo variar justo antes del intermedio en el único acercamiento del conjunto amarillo al área azulgrana durante la primera mitad. Una rápida contra finalizó con un disparo del argentino Luciano Vietto y una extraordinaria intervención del arquero alemán Marc-André Ter Stegen.
Sin embargo, Stegen regaló el tanto visitante en el comienzo de la segunda parte. Trigueros disparó desde 25 metros y el alemán cometió un grave error, por mucho que el lanzamiento le llegara con mucha potencia.
No hubo tiempo para comprobar el impacto del gol porque el Barcelona recuperó la ventaja nada más sacar de centro. Fue en otro error de la defensa del Villarreal, que concedió una pared con Iniesta, quien marcó con habilidad.
El equipo amarillo acusó el efecto del tanto y el Barcelona recuperó la intensidad. Su empeño encontró premio a los 64 minutos con un gol de Piqué en un saque de esquina. El conjunto azulgrana ha mejorado notablemente esta temporada en este departamento del juego. Eso sí, el Villarreal protestó una posible falta de Suárez.
El Barcelona tuvo la oportunidad de dejar prácticamente sentenciada la eliminatoria a los 72 minutos con un penal cometido por Musacchio, quien no tuvo su mejor noche. Messi le dejó tirar a Neymar, quien lanzó muy mal y Asenjo paró.
El Villarreal intentó algo más en el tramo final del partido y montó un par de contras peligrosas, pero se estrellaron con el gran despliegue de Mascherano y Piqué, magníficos durante todo el partido.
El conjunto de Luis Enrique celebró un claro triunfo, su décimo consecutivo entre todas las competiciones, que le acerca a la final de la Copa del rey. El 4 de marzo se resolverá la eliminatoria en El Madrigal, con el Barcelona como claro favorito.