La Copa América se juega en Brasil. El torneo, su organización ha sido criticada por todos lados, sobre todo porque el gigante sudamericano es el país que mas casos de Covid-19 tiene en Latinoamérica con más de 17 millones.
Entonces ¿Por qué se juega ahí? ¿Es verdad que es un desastre?
El brasileño Julio César Pinheiro, exjugador de Celaya, Cruz Azul, Atlas, Pumas y Monterrey, vive en Sao Paulo, y habla que muchas de las críticas que hay tienen que ver a los intereses políticos, comerciales y televisivos. “Los intereses por delante”, comenta.
Todo lo que se dice, señala “tiene que ver con golpes políticos más que otra cosa”.
Pinheiro lo explica: “Aquí existe una televisora que se llama Globo, que no se lleva con el presidente (Jair Bolsonaro), lo critica mucho y él también dice cosas, en fin. Muy poderosa esta televisora, y hay otra que se llama SVT, que compró los derechos de televisión de la Copa América, y así empezó todo el desmadre… La Globo diciendo que esto no se podía hacer por el Covid y criticando mucho, todo es un gran hipocresía”.
El zurdo explica más a fondo, “sí, es verdad, hay Covid, pero los partidos se llevan a cabo sin gente en el estadio, con todos los protocolos que se deben de seguir y se juegan normalmente. La Copa Libertadores se está llevando a cabo desde hace tiempo, y vienen equipos de Uruguay, Argentina, Paraguay, y vienen sin problemas, pero como la cadena Globo tiene los derechos de la Copa Libertadores, ahí no se dice nada, y como la Copa América no pasa por su canal, entonces no se puede. La cosa es clara: en Brasil se juega la Libertadores, se juega el campeonato brasileño en la seria A, B, C, y D, entonces… ¿por qué no la Copa América? Brasil es un país enorme, entre estados hay seis horas de vuelo y el sistema de salud ahí va… No veo un problema, todo es por el lado político y empresarial”.
Toda la mala publicidad que hay contra el torneo y contra el país, “es por esa televisora, con todos sus intereses en juego. Estamos viviendo un mundo complicado. Y no digo que todo lo que hace el gobierno está bien. Mira, hace poco estuve en México, se acercaban las elecciones y le dije a un amigo: cuando se acerquen las votaciones se abrirá todo y dirán que los contagios bajaron, y cuando se acaben cerrarán todo y saldrán las muertes. Es muy complicado lo que se vive, es muy triste que todo se maneje por política… Al final lo que está en juego son las vidas y los políticos, todos, lo que quieren es verle la cara a la gente”.