A pesar de las múltiples quejas y conflictos dentro del mutado Ascenso MX, la Liga de Expansión arranca con cambios de sedes y clubes que nos les quedó de otra que aceptar esta nueva realidad.
Los 12 equipos que quedaron en el cancelado torneo, se mantienen en competencia, pero tres de ellos cambian de sede.
El Atlante regresaría a la Ciudad de México, después de 13 años en el Caribe mexicano, donde conquistaron el Apertura 2007 y perdieron la categoría en Primera División. Los azulgrana, con su base de aficionados en la capital del país, jugarían sus partidos dentro del estadio Azul, en la colonia Nochebuena.
Con la partida de los Potros, queda libre la sede en Cancún, por lo que los Cafetaleros dejarían Chiapas por Quintana Roo.
El último de los cambios sería el del Atlético Zacatepec a Morelia, para ocupar la sede que dejó abierta Monarcas al mudarse a Mazatlán. José Luis Higuera, exdirectivo del Guadalajara, sería la cabeza detrás de ese proyecto.
El resto de los equipos se mantendrían en sus ciudades, a la espera de las posibles ventas de Mineros y Dorados.
Mientras que Correcaminos, Venados y Leones Negros, los “rebeldes” ante la desaparición del ascenso a Primera División, no tuvieron de otra que aguantar el cambio radical.
La Liga de Expansión se completará con los tres clubes de la Liga Premier y las filiales de los Pumas y Guadalajara.
Es un viernes de mucho movimiento en la segunda categoría del futbol mexicano.