La llegada de Ricardo Peláez a Chivas se encuentra en el aire por diferentes motivos que está tratando la dirigencia que encabeza Amaury Vergara, de darle solución, entre ellos hay dos principalmente: uno es el presupuesto requerido para poder operar y la otra, personal de confianza que pide Pelaéz en este nuevo proyecto, que dejaría a otros sin trabajo, como Mariano Varela, por ejemplo.
No hay venta de derechos
La cuestión del presupuesto trae a la dirigencia de cabeza analizando números, buscando de dónde podrían acumular la cantidad que se pretende para poder reforzar el equipo, ya que hasta este momento, los arreglos de derechos de televisión no están vendidos en México ni Estados Unidos para el torneo entrante.
Quienes transmiten en este momento, TV Azteca, Multimedios, UTDN y Televisa, al concluir el actual campeonato terminan contrato y las negociaciones para renovar están lejos de un final feliz, por lo tanto, no se puede contar con una proyección segura porque no hay entrada firmada.
Lejos de arreglo con empresas
Chivas pide una cantidad que las empresas interesadas, de acuerdo a la marcha del equipo en los últimos torneos, no es acorde. Poco a poco el producto está decayendo en valor, pues acumularán cinco torneos sin Liguilla y no es rentable para las empresas estar transmitiendo de acuerdo al precio que solicita Chivas.
Sí, es un equipo popular, acapara multitudes cuando juega, pero no levantan en resultados y jornada tras jornada, sigue hundido con problemas de cociente.
La diferencia para vender los derechos de transmisión, están lejos entre lo que pide el Guadalajara y lo que ofrecen las empresas. De hecho en Estados Unidos transmite el propio Chivas desde el actual torneo, porque no hubo arreglo económico y ninguna de las empresas interesadas en su momento, pudo llegar al precio que pretendía la dirigencia tapatía.
Al no darse la renovación de la empresa que transmitía para la Unión Americana, en Chivas pensaron que Telemundo entraría corriendo por los derechos, pero el precio es muy alto, tanto que por más números que hicieron para cuadrar y quedarse con las transmisiones, no les dieron y desistieron ambas empresas que estaban interesadas.
Peláez requiere presupuesto
Al no tener dinero seguro con contratos firmados por derechos de transmisión, la dirigencia no puede contratar a Peláez, tampoco prometerle nada en corto plazo porque no hay nada cerrado, motivo por el cual en la charla que se tuvo en la semana, al ver el presupuesto que se solicitó supieron que sería difícil su contratación.
Otro problema no menor, es que en caso de que llegara Peláez, entrara su hijo, con lo cual dejaría sin trabajo a alguien, quizá Mariano Varela, que viene desempeñándose como director deportivo desde un tiempo y la directiva no tiene en sus planes, darle las gracias.
Coinciden en objetivos
Lo que está claro, es la petición de autonomía en determinaciones deportivas que pretende tener Peláez, en esto no hay problema, la dirigencia lo concede porque eso es precisamente lo que quiere, una cabeza deportiva reconocida para poder operar en propuesta de refuerzos que iría de un A, B y C, mismos que la propia dirigencia cerraría y se haría cargo del tema de acuerdos monetarios, porque él no tiene injerencia en manejo de dinero.
Peláez se regiría por resultados, en eso ambas partes están de acuerdo, trabajar por objetivos, pero para eso, entra la exigencia de refuerzos y de los cuales también al no tener derechos vendidos, es otro problema y la única solución es buscar darle salida a elementos que actualmente se tienen, para hacerse de recursos.
También tiene claro la dirigencia, que al contratar refuerzos para sacar de inmediato al equipo del problema de cociente, la nómina crecería mucho. Los derechos de transmisión juegan un papel importante, para poder operar.
Le hacen guiño
Chivas tiene un competidor por los servicios de Peláez, es el Monterrey, quien le habría prometido que en enero si llegan a un acuerdo, podría tomar el equipo en un proyecto a largo plazo y el ex goleador ya ha tenido algunas charlas al respecto.