Cuando Fernando Guerrero dio el silbatazo final al partido entre Cruz Azul y Rayados, Carlos Salcedo salió entre lágrimas del terreno de juego, mientras sus compañeros de equipo y los aficionados, le aplaudían por el gran nivel que ha mostrado en la Liguilla .
En imágenes transmitidas por TUDN y por videos en redes sociales, se aprecia el momento exacto en el que Salcedo se tira al piso y comienza a llorar, minutos después, Uriel Antuna llegó, lo levantó y le dio un gran abrazo.
Estos cinco meses han sido un sube y baja de emociones para el Titán, quien solo Martín Anselmi sabe la verdad por lo que ha pasado en este tiempo.
En conferencia de prensa, el técnico de Cruz Azul, mencionó que el Carlos Salcedo ha vivido momentos complejos y difíciles.
“Yo no voy a ser el que descubra la jerarquía de Carlos Salcedo. Él tiene mucha experiencia para enseñarnos, ha sido campeón y ha vivido muchas cosas difíciles y es una persona sensible y honesta, y cuando se encuentran personas que hablan de frente con la verdad y sin vueltas yo creo en eso”, menciona en primera instancia Anselmi.
Y continuó: “Carlos no es que no estaba en planes, Carlos precisaba un tiempo para definir su futuro y llegó un momento en el que retornó a los entrenamientos y tuvimos una charla muy linda y muy larga donde teníamos que definir su futuro y él me planteó lo que estaba viviendo, yo empaticé enseguida en eso y nos pusimos tiempos, es decir, vamos a ponernos tiempos a ver qué es lo que le depara. Ahora, le dije ‘nosotros pensamos que eres un jugador importante y nos gustaría que te quedes’”.
El defensor cementero comenzó como jugador de cambio y hoy, ya es pieza importante en el once titular. Para Martín Anselmi era importante que definiera su futuro y así recuperar su nivel futbolístico.
“Pasaron 15 días que fue el plazo que nos habíamos puesto y él retornó a los entrenamientos ya con el grupo, en ese momento ya había retornado a los entrenamientos pero había que tomar una definición porque el mercado de pases aún estaba abierto, y con el correr del tiempo perdió casi 50 sesiones de entrenamiento, y con el correr del tiempo fue engranando, fue poniéndose a tono, fue compitiendo y nos fue demostrando el gran jugador que es y el nivel en el que está, y para nosotros tenerlo ahí es sinónimo de jerarquía, sinónimo de liderazgo y nos hace muy felices que se haya desarrollado así esta historia”, finalizó el técnico Celeste.