Mauricio García de la Vega se ha vuelto noticia nacional en Holanda. El empresario mexicano, dueño del Roda J.C., fue sacado con lujo de violencia el sábado anterior de su mismo palco en el estadio, en una cuestión que lleva tintes de racismo.
Los mismos empleados y encargados de seguridad, vieron todo lo que sucedió y alguno de ellos le gritó: «No hablo español», cuando pidió ayuda.
Todo parece indicar que el director general del equipo Hassel Meijer, a quien De la Vega puso de encargado del Roda mientras la segunda división de Holanda hace las investigaciones de rigor para proclamarlo dueño absoluto del equipo, quiere boicotearlo con el pretexto de que no pone dinero para el equipo, siendo que por ley, hasta que no se le entregue el club al 100 por ciento, no puede invertir en su totalidad.
El conflicto puede tomar tintes de racismo por la forma en que fue tratado el empresario mexicano, tanto que la misma Embajada de México en Holanda, ha intervenido para exigir una explicación por el trato que se le dio.