Miércoles en el Camp Nou y domingo en el Santiago Bernabéu. Miércoles frente a Juventus, domingo ante Real Madrid. Miércoles, por otro milagro para seguir con vida en la Champions League; domingo, por ese golpe necesario para continuar en la lucha por la conquista de la Liga. Está más que claro queBarcelona en general, y Lionel Messi en particular, están parados frente a una semana clave con tres ingredientes que deben tener muy presentes.
Los problemas defensivos
El equipo de Luis Enrique viene de recibir siete goles en tres partidos (2 del Málaga, 3 de la Juve y 2 de la Real Sociedad) que sintetizan la endeblez en la última línea. En esta temporada ya padeció 50 tantos en 51 encuentros, apenas uno menos que los recibidos en toda la temporada anterior.
«No estamos en nuestro mejor momento de confianza. Hoy el equipo no se siente sólido ni con tres ni con cuatro defensores. Si te ves sólido, todo es diferente». El manojo de palabras de Gerard Piqué resume el panorama a la perfección.
Y en este contexto hay que tener en cuenta que si Juventus convierte un gol en suelo catalán, entonces el Barça tendrá que hacer al menos cinco para superar la serie de cuartos de final. Es cierto que después del 4-0 sufrido ante el PSG en París hubo una recuperación de cuento en la revancha, pero también es cierto que no todos los días llueven milagros y que la Juventus no tiene la desidia del PSG.
La presencia de Dybala
Goleador y figura en el duelo de ida, Paulo Dybala se lesionó luego, durante el partido que Juventus le ganó a Pescara 2-0 con dos tantos de Higuaín por la Liga italiana. Aquel fuerte golpe en el tobillo a raíz de un choque con el ghanés Sulley Muntari puso en duda su participación en la revancha del miércoles. Sin embargo, el propio entrenador, Massimiliano Allegri, había expresado su confianza en poder contar con el cordobés. Y este lunes Dybala participó de la práctica con el resto del equipo.
Si bien tiene todavía otro ensayo por delante, el del martes antes de viajar a Barcelona, todo parece indicar que Dybala estará a disposición del entrenador para la revancha. Otra preocupación más para Messi y compañía.
La ausencia de Neymar
El brasileño, que acaba de expresar en las últimas horas su deseo de jugar «algún día» en Flamengo, será el gran ausente el domingo frente a Real Madrid. Y con Neymar suspendido, habrá que ver cómo queda el equipo, desde lo físico pero también desde lo anímico, luego del encuentro con Juventus. Como es a todo o nada, el resultado en este caso potenciará las cosas. Salvo Messi, que a la vuelta de la derrota en Turín siguió con su costumbre goleadora en la Liga, el resto siguió exhibiendo un aspecto demacrado que convoca a la preocupación.
Con información de la Nación de Argentina.