El Universal
La credibilidad del atletismo a nivel mundial pende de un hilo y así se mantendrá mientras no se elimine a las “malas semillas” que contaminan a la especialidad, opinó el nueve veces campeón olímpico Carl Lewis.
El estadounidense, invitado especial del foro ProRío 2016 se refirió al escándalo de dopaje que enfrentan actualmente países como Rusia.
“Las sustancias prohibidas son el peor enemigo del deporte y por ello la credibilidad se ha perdido los últimos años. El problema no es sólo de los atletas, hay muchos países que no tienen financiamiento para invertir en realizar pruebas antidopaje y eso ya es una gran limitante”, dijo el especialista en pruebas de velocidad y salto de longitud.
Lewis, quien ofreció una entretenida plática a más de 500 deportistas de alto rendimiento, argumentó que desde su época como atleta activo existen sustancias dopantes y que son los deportistas los principales responsables de tomar una decisión equivocada.
“Todos iniciamos nuestras carreras con buenas intenciones y con la meta de ser los mejores; desgraciadamente muchos se corrompen en el camino y en eso tienen que ver también los entrenadores, el equipo multidisciplinario y hasta los medios de comunicación. Al final, todos pierden”, añadió.
Mike Powell, medallista olímpico, compartió la opinión de su compatriota.
“En nuestros tiempos se respetaba a los atletas como Carl, pero todo ha cambiado sustancialmente, hoy en día me pregunto ¿qué tipo de ejemplo pueden dar los tramposos, de quién pueden ser ejemplo”, dijo.
Ambos personajes también coincidieron en mencionar que el nivel de pruebas como el salto de longitud va en retroceso, en lugar de avanzar.
“Por eso no creo que se vaya a romper ninguna marca en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. En el caso específico del salto de longitud, muchas personas piensan que es sencillo pero no es así, de hecho es una de las especialidades más complicadas del atletismo. Es realmente muy complicado que se establezcan nuevos récords, principalmente en tiempos como los que estamos viviendo”, finalizó Lewis.