Los rojinegros de Atlas se metieron al “infierno” y salieron “quemados” en la goleada que los Diablos Rojos de Toluca (4-1) les propinaron en la cancha del Estadio Nemesio Díez.
El agobio acompañó, en todo momento, a los visitantes. Sus debilidades defensivas, sumadas a que el equipo de Renato Paiva se mantiene firme como candidato al título, les hicieron vivir una auténtica “pesadilla”.
Bastaron treinta y tres minutos de partido para que el delantero portugués, Paulinho, abriera el marcador en favor de los Diablos Rojos. Un remate con la izquierda, desde el centro del área, que marcó el inicio de la sentencia con la que “castigarían” al Atlas.
El segundo tanto no tardó en llegar; Helinho, quien recientemente se unió a los escarlatas, se estrenó en el balompié mexicano. Tan sólo siete minutos después del gol de Paulinho.
No conformes, los dirigidos por Renato Paiva continuaron “sepultando” a Atlas en el segundo capítulo del duelo.
Al cincuenta y cuatro, Isaías Violante le dio el tercero a los locales. A partir de ese momento, cada minuto duró una eternidad para los rojinegros. Y no conforme, Violante se encargó de que vivieron un auténtico “infierno” cuando marcó un doblete al sesenta.
Atlas apareció hasta el setenta y ocho. Un solitario gol de Aldo Rocha poco pudo hacer para salvar al equipo; la victoria de Toluca era inminente.
Los Diablos Rojos tienen levantada la mano para convertirse en candidatos al título del Apertura 2024. Y en la búsqueda de ese sueño, verán nuevamente acción en la onceava fecha del torneo, cuando se enfrenten a los auriazules de Pumas.